Con 44 años de edad, el paraguayo Paulo César Da Silva se despidió del futbol en activo, al disputar su último partido oficial con el conjunto con el que inició, el Atlántida, y dejando una imborrable huella de grandeza en cada club que defendió, entre ellos, el Deportivo Toluca Futbol Club.
El incansable Capitán, líder dentro y fuera de la cancha, profesional, entregado, Paulo Da Silva defendió los colores de los Diablos Rojos en dos etapas, de 2003 a 2009 y de 2013 a 2017.
Como Diablo, Da Silva se consagró como leyenda al ganar dos títulos de liga (2005 y 2008) y una edición del Campeón de Campeones con Toluca (2006).
A esos títulos con Toluca se suman también dos campeonatos de Liga conquistados con Libertad de Paraguay, y a nivel selección, participó en las Copas del Mundo de Alemania 2006 y Sudáfrica 2010, dejando también una espectacular marca como el jugador con más partidos disputados con la Albirroja, con un total de 150.
Referente de los Diablos Rojos, un defensa central que marcó época, Da Silva es recordado con cariño por los aficionados del Toluca FC por la entrega con que defendió los colores de la institución, y el orgullo con que portó la capitanía.
Paulo Da Silva no solo brindaba total seguridad a la defensa de los Diablos, sino que destacó por su aporte ofensivo ya que en 413 duelos oficiales disputados con los rojos convirtió 33 anotaciones.
Tras iniciar su carrera futbolística con Atlántida en su natal Paraguay, Da Silva también pasó por otros equipos como Cerro Porteño, Libertad; Perugia y Venezia en Italia; Lanús de Argentina; Sunderland en Inglaterra y Real de Zaragoza de España.
En México también jugó para Pachuca entre 2012 y 2013.
Su calidad futbolística, profesionalismo y liderazgo, le llevó a prolongar su carrera futbolística en activo 29 años. Cumplió el sueño de retirarse con el equipo con el que inició, el Club Atlántida, con un triunfo 3-1 sobre el Olimpia de Itá en el Estadio Ricardo Grégor, en la última fecha del campeonato de Primera B.
El adiós de Da Silva el incansable y eterno “Capitán”, fue emotiva y no podía ser para menos, ante una trayectoria que no solo merece ser aplaudida, admirada y recordada, especialmente en lo que respecta a su paso por Toluca FC, donde dejó un gran legado.